De sexo se habla y se escribe mucho, mas de lo que se practica.
Esto no es una guía para practicar mas, pero puede ser que mis experiencias
te hagan sonreír, sonrojar o te ayuden a conocer mas sobre el tema, buscarle
nuevos puntos de vista, o aprender juntos sobre sexo, erotismo y placer.

miércoles, 21 de julio de 2010

Manual para hacer gozar a una mujer


El jardín perfumado” es un manual árabe sobre el arte del amor, escrito por el Jeque Nefzawi en Túnez, durante el Siglo XIV. El jeque árabe es considerado como uno de los maestros de la literatura erótica.
Este manual puede consultarse como guía de posiciones eróticas, con descripciones prácticas, relatos eróticos y consejos para desarrollar las relaciones de pareja. También se pueden encontrar advertencias sobre salud sexual y recetas para remediar enfermedades sexuales. Hace un listado de nombres para el pene y la vagina, tiene una sección de interpretación de los sueños, entremezclando todo con historias pensadas para dar contexto y hacerlo divertirlo.
Aquí os dejo uno de los extractos mas conocidos, referido a “todo lo que resulta favorable al coito”

Has de saber, ¡oh!, Visir (¡la misericordia de Dios sea contigo!), que si deseas experimentar una cópula agradable, que proporcione igual satisfacción y placer ambas partes, es necesario retozar con la mujer y excitarla mediante mordiscos, besos y caricias. Vuélcala sobre el lecho, unas veces sobre su espalda, otras sobre su vientre, hasta que veas que ha llegado el momento del placer. Excítala besando sus mejillas, chupando sus labios y mordisqueando sus senos. Besa su ombligo y sus muslos y apoya una mano provocativa sobre el pubis. Muerde sus brazos y no olvides ninguna parte de su cuerpo. Tómala estrechamente hasta que ella sienta tu amor, luego suspira y entrelaza tus piernas y brazos con los suyos.
Cuando veas los labios de una mujer temblar y enrojecerse, y languidecer sus ojos y hacerse sus suspiros más profundos, sabrás que desea copular. Éste es el momento para situarse entre sus muslos y penetrarla. Si has seguido mis consejos, ambos disfrutaréis de una cópula encantadora que dejará un recuerdo delicioso.
Por tanto, hombres, cuando hayáis conducido a la mujer a la condición favorable, introducid vuestro miembro, y si entonces os preocupáis por moveros de la manera adecuada, ella experimentará un placer que colmará todos sus deseos. No abandonéis todavía su pecho. Dejad que vuestros labios vaguen por sus mejillas y vuestra espada repose en su vaina. Tratad ardientemente de excitar su chupador (1) y así vuestro trabajo será dignamente coronado. Si gracias al favor del Todopoderoso, lográis el éxito, tened cuidado de no retirar vuestro miembro. Permitidle que permanezca y apure la copa del placer. Prestad atención y escuchad los suspiros y quejas y murmullos de la mujer, puesto que ellos atestiguarán la violencia del placer que le habéis procurado.
Alguien ha dicho: «Si deseas copular, coloca a la mujer sobre el suelo, abrázala estrechamente y pon tus labios sobre los suyos. Luego apriétala, chúpala, muérdela; besa su cuello, sus senos, su vientre y sus flancos; estrújala contra ti hasta que el deseo la debilite y, al verla en este estado, introduce tu miembro. Si obras de este modo, vuestro goce será simultáneo, y ése es el secreto del placer. Pero si olvidas este plan, la mujer no satisfará su deseo ni obtendrá goce alguno.»
Y cuando el cese del goce ponga fin a vuestros devaneos amorosos, no os levantéis bruscamente. Retirad vuestro miembro con circunspección, y permaneced con ella yaciendo sobre vuestro costado derecho en este lecho de placer. De este modo, todo saldrá bien, y no seréis como aquellos que montan a una mujer como lo haría un mulo, sin conceder atención a los principios del arte, retirándose y alejándose tan pronto como han eyaculado. Evitad un método tan burdo, que priva a la mujer de todo placer. Para resumir, incumbe al conocedor de la cópula no omitir ninguna de mis recomendaciones, puesto que de su observancia depende la felicidad de la mujer.
No bebas agua de lluvia inmediatamente después del coito. Es aconsejable descansar después del coito y no practicar ejercicios violentos.
Si deseas repetir el acto, perfúmate con dulces aromas y luego acércate a la mujer y alcanzarás un resultado feliz.

(1)Nota: el texto así se refiere a la vagina

3 comentarios:

  1. El sexo oral, ya me aburre; las conversaciones picantes ya no son lo que eran. Y el escrito... me desanimo. Así creo que me cogeré el Manual y me lanzare en busca de la aventura.

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  2. Si el sexo oral te aburre, es que no estás con la pesona adecuada, se puede catalogar de arte, y es un arte reservado para unos pocos

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  3. Touché mi pequeña "cherry", sin embargo no estaba hablando (del doble sentido de la expresión) de sexo oral como practica sexual sino del verbal (ese por el transmitimos una información). Pero puedo aseverar que es un arte del cual no rehuyo a recibir de una mujer como darselo a una damisela que lo merezca. ¿que prefieres? ¿ser tu...? ¿o que sea a ti...?

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